La etapa pos-Moreno que atraviesa el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) está abriendo la puerta a nuevos "descubrimientos" y correcciones de datos públicos sospechados de manipulación por parte del organismo oficial.

Un buen ejemplo es lo que sucedió con el superávit de la balanza comercial de 2013 que, a fines de abril, fue recalculado hacia abajo por el instituto en US$ 1020 millones. El retoque coincidió con la denuncia de varios economistas, que habían hallado inconsistencias en los números informados por el Gobierno en el comercio con el mundo durante el año pasado.

Esto es, disidencias entre distintas estadísticas del Estado (como las exportaciones registradas por el mercado único de cambios del Banco Central) y con los números de intercambio comercial informados por los países compradores.

En este sentido, un informe elaborado por la consultora Elypsis, dirigida por el economista Eduardo Levy Yeyati, al que tuvo acceso LA NACION, afirma que las evidencias de manipulación se mantuvieron en el primer trimestre de 2014.

El trabajo, realizado por el economista jefe, Luciano Cohan, compara los datos del Intercambio Comercial Argentino (ICA) que informa el Indec para distintos destinos con los datos de importaciones (compras a la Argentina) que brindan los organismos estadísticos de los socios comerciales del país. La consultora aclaró que la información disponible permitió analizar el 60% de las exportaciones argentinas.

"Las diferencias con Brasil son las más significativas. Encontramos diferencias anómalas de US$ 1500 millones para 2013 y de US$ 790 millones en los primeros tres meses de 2014", señala el informe.

"Históricamente la diferencia entre los registros de exportaciones del Indec y el de importaciones del Ministerio de Desarrollo, Industria y Comercio de Brasil eran muy pequeñas: US$ 136 millones para el período 2007-2012.

Sin embargo, "en 2013 la brecha aumentó significativamente a partir de agosto, hasta alcanzar US$ 1600 millones a fin de año, tendencia que continúa en los primeros tres meses de 2014".

Por otra parte, con Uruguay y Paraguay Elypsis observa el mismo fenómeno, con una sobreestimación calculada en US$ 450 millones en 2013. "En el caso de los dos socios más chicos del Mercosur, mientras históricamente la diferencia entre ambas series ascendía a US$ 200 millones a favor de Paraguay y Uruguay -brecha explicada por la diferencia en valuación FOB y CIF- pasó a ser ahora de US$ 250 millones en favor de la Argentina", agrega el informe.

Respecto de la Unión Europea (UE), la consultora afirma que "en el período de 2007 a 2012 los reportes del Indec y de la UE presentaban una diferencia promedio de alrededor de US$ 800 millones, resultado de la diferencia de valuación entre FOB y CIF. En los reportes recientes, sin embargo, la brecha histórica se cierra hasta alcanzar prácticamente cero en los primeros meses de 2014".

Y agrega: "Repetimos el ejercicio para Chile, Nafta, Japón y Venezuela. En estos casos, si bien se observan algunos comportamientos anómalos de las series, la evidencia de manipulación no resulta concluyente".